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La historia completa de Sauron, el Señor Oscuro de la Tierra Media

"Un Anillo para gobernarlos a todos, Un Anillo para encontrarlos, Un Anillo para atraerlos a todos, y atarlos en las tinieblas"

Poema del Anillo de Sauron

En el corazón de la oscuridad que amenaza la Tierra Media, hay un nombre que resuena con poder y terror: Sauron. Antagonista principal de El Señor de los Anillos, Sauron es mucho más que un villano sin rostro. Su historia se extiende desde los albores del mundo hasta la Tercera Edad, dejando una huella indeleble en cada rincón del legendarium de Tolkien.

Pero ¿quién fue realmente Sauron? ¿Cuáles fueron sus orígenes? ¿Y cómo se convirtió en el “Ojo sin párpado” que todo lo ve? Acompáñanos en este viaje por las sombras para conocer en profundidad la historia del Señor Oscuro.

Tabla de contenidos

El origen de Sauron, quien y qué fue originalmente?

Antes de ser temido, Sauron fue admirado. Su nombre original era Mairon, que en quenya significa “el Admirable”. Era un Maiar, una especie de espíritu poderoso creado por Ilúvatar, el dios supremo del legendarium. En un principio sirvió al Vala Aulë, el herrero de los dioses, y destacó por su afán de orden, precisión y estructura.

Pero ese deseo por imponer orden absoluto lo llevó a admirar a Melkor (Morgoth), el primer Señor Oscuro, quien ansiaba dominar toda la creación. Seducido por su poder, Mairon se volvió su servidor, y adoptó el nombre por el que sería conocido: Sauron, el Aborrecido.

Sauron, el señor de fuego

Sauron al servicio de Morgoth

Así fue como, durante la Primera Edad, Sauron fue el segundo al mando de Morgoth, y se convirtió en un maestro del engaño, la necromancia y la corrupción. Controló la torre de Tol-in-Gaurhoth, donde aterrorizó a los enemigos de su maestro y llevó a cabo horribles experimentos.

Participó en las guerras de Beleriand y demostró una habilidad temible para manipular tanto cuerpos como voluntades. A diferencia de Morgoth, que se apoyaba en la fuerza bruta, Sauron prefería el control sutil, las promesas envenenadas y la corrupción desde dentro.

El engaño de Annatar y la forja de los Anillos de Poder

Tras la derrota de Morgoth, Sauron no desapareció. Al contrario, se reinventó. En la Segunda Edad, adoptó una nueva apariencia hermosa y seductora bajo el nombre de Annatar, el Señor de los Dones. Con esta farsa, logró ganarse la confianza de los Elfos de Eregion, entre ellos Celebrimbor, nieto de Fëanor.

Juntos forjaron los Anillos de Poder, que fueron entregados a Elfos, Enanos y Hombres. Pero en secreto, Sauron forjó el Anillo Único en el Monte del Destino, diseñado para dominar a los demás. Cuando se lo puso, los Elfos percibieron su traición y ocultaron sus anillos. Así comenzó una nueva era de guerra.

La guerra contra los Elfos y la caída de Númenor

Desenmascarado, Sauron libró una larga y devastadora guerra contra los Elfos y los pueblos libres de la Tierra Media. Fundó su reino oscuro en Mordor, donde construyó la gigantesca torre de Barad-dûr, alimentada por el poder del Anillo Único.

Durante esta etapa, Sauron sometió vastas regiones, corrompió reinos enteros de Hombres y forjó alianzas con ellos. Su expansión solo fue detenida temporalmente por la alianza entre los Elfos de Gil-galad y los Hombres de Númenor, que lograron derrotarlo en varias ocasiones.

Fue capturado por los poderosos Númenóreanos y llevado a su isla, pero lejos de ser destruido, Sauron usó su astucia y retórica para ascender al poder entre ellos. Convenció al rey Ar-Pharazôn de desafiar a los Valar y reclamar la inmortalidad atacando Aman, el reino bendecido.

El castigo fue catastrófico: Númenor fue hundida bajo las aguas por mandato de Ilúvatar, en un evento que transformó el mundo. Aunque el cuerpo de Sauron fue destruido, su espíritu escapó de la ruina, regresó a Mordor y nunca más pudo adoptar una forma bella. Desde entonces, su presencia sería terrorífica, reflejo de su verdadera naturaleza.

Anillo Único de Sauron

La Última Alianza y la caída de Sauron

De vuelta en Mordor, Sauron reconstruyó su poder y sus ejércitos. Esto culminó en el final de la Segunda Edad, cuando Elendil, rey de los hombres de Arnor y Gondor, y Gil-galad, alto rey de los Elfos, formaron la Última Alianza para derrotarlo. Sus ejércitos marcharon a Mordor y libraron una batalla titánica en las llanuras de Dagorlad y al pie del Monte del Destino.

Aunque Elendil y Gil-galad murieron en el combate, su sacrificio permitió que Isildur, hijo de Elendil, cortara el Anillo Único de la mano de Sauron. En ese instante, Sauron fue derrotado y su cuerpo destruido, y su espíritu se desvaneció por siglos.

Sin embargo, Isildur no destruyó el Anillo. Lo reclamó como botín, sellando así el destino de las futuras edades… y permitiendo que Sauron, aunque debilitado, pudiera regresar.

Sauron en la Tercera Edad: el Ojo sin párpado

En la Tercera Edad, Sauron empezó a reconstruir su poder lentamente. Aunque no poseía un cuerpo físico estable, su espíritu era lo bastante fuerte para volver a levantar Barad-dûr.

En secreto, se instaló primero en Dol Guldur, una fortaleza escondida en el Bosque Negro, donde fue conocido como el “Nigromante”. Durante siglos, los sabios ignoraron su verdadera identidad, pero poco a poco su influencia oscura se hizo evidente. El Concilio Blanco, formado por Gandalf, Galadriel, Saruman entre otros, intentó expulsarlo, y aunque lo logró temporalmente, Sauron regresó a Mordor con más fuerza.

Desde la cima de Barad-dûr, se manifestó como un gran Ojo en llamas, símbolo de vigilancia y terror. Su mirada espiritual alcanzaba todos los rincones del mundo, y sus ejércitos crecían día tras día. Subyugó de nuevo a pueblos humanos, creó vastas hordas de orcos y bestias, y sembró el miedo entre sus enemigos. Su meta estaba clara: recuperar el Anillo Único y dominar toda la Tierra Media.

Barad Dur

La Guerra del Anillo y la derrota final de Sauron

Sauron sabía que, mientras el Anillo Único existiera, podía volver a recuperar toda su fuerza. Lo buscó sin descanso, sin imaginar que el portador era un hobbit: Frodo Bolsón.

Durante la Guerra del Anillo, Sauron lanzó ataques contra Gondor, Rohan y todos los pueblos libres. Sus siervos, los Nazgûl, extendieron el miedo por toda la Tierra Media.

Sin embargo, el Anillo fue destruido en el Monte del Destino gracias al valor de Frodo, Sam y Gollum. Con ello, Sauron fue finalmente derrotado.

No murió como lo haría un ser mortal, pero fue deshecho: su espíritu quedó disperso, sin forma ni poder para reconstruirse.

¿Eres fan de Sauron? Esto no puede faltar en tu colección

Si te fascina el personaje de Sauron y su presencia imponente en la Tierra Media, hay dos piezas clave que no pueden faltar en tu colección:

Una réplica fiel, con la inscripción en élfico y todo el poder simbólico del Señor Oscuro. Perfecto para fans que sienten la tentación de dominar a todos… o simplemente quieren llevar una pieza icónica de la saga.

Figura de Nazgul

Los siervos más temidos de Sauron, espectros del anillo que representan su influencia corruptora. Esta figura es ideal para exponer junto a libros, mapas o reliquias de Mordor.

Preguntas frecuentes sobre Sauron

Era un Maiar llamado Mairon, al servicio del Vala Aulë.

No. Morgoth era un Vala, una entidad mucho más poderosa que los Maiar. Pero Sauron fue más eficaz en sus planes.

Sí, aunque en una forma diferente. En la serie, se exploran sus primeros pasos como Annatar y su relación con los Elfos.

Tras su pérdida de forma física, dependía de sus siervos y aliados para actuar en el mundo físico.

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NUESTRAS MEDIDAS DE ANILLOS

MEDIDA ESTÁNDAR
Equivale a una talla de anillo 23

Diámetro interior de 2,0 cm
Longitud de circunferencia de 6,3 cm

MEDIDA PEQUEÑA
Equivale a una talla de anillo 17
Diámetro interior de 1,8 cm
Longitud de circunferencia de 5,7 cm

MEDIDA GRANDE
Equivale a una talla de anillo 30
Diámetro interior de 2,25 cm
Longitud de circunferencia de 7,0 cm

¿Cómo puedo saber mi talla?

Hay varias maneras de saber tu talla de anillo, vamos a ver dos de ellas, las que consideramos más fáciles:

OPCIÓN 1: MEDIR UN ANILLO DE TU TALLA

Necesitarás
– Una regla o metro de costura
– Un anillo que te vaya bien

 Procedimiento
Colocando el anillo encima de la regla o metro.
Necesitas medir el espacio de dentro del anillo por su parte central para saber el diámetro interior de tu anillo. Una vez tenemos esta medida, utiliza la tabla del final de la página para conocer la talla de anillo que utilizamos!

OPCIÓN 2: MEDIR LA TALLA DE TU DEDO

Necesitarás
Metro de costura o tira de papel y regla

Procedimiento
Esta opción es simple, pero tenemos que ser muy precisos. Todo lo que hay que hacer es envolver el dedo en el que queremos vestir nuestro anillo con el metro de costura para conseguir la circunferencia del dedo.

Si no dispusieras de metro de costura puedes cortar una tira de papel de unos 2 cm. de anchura, rodear el dedo con la tira y hacer una marca. Luego mides ese tramo del papel con una regla. Utiliza la tabla que encontrarás a continuación para saber tu talla de anillo.

TABLA DE TALLAS DE ANILLO
OPCIÓN 1
Diámetro
OPCIÓN 2
Circunferencia
EQUIVALENTE TALLA EUROPEA TALLA ANILLO
TIERRA MEDIA
< 17,5 mm < 5,5 cm < 15 No recomendado
17,5 a 19,1 mm 5,5 a 6 cm 15 a 20 Pequeña
19,4 a 21 mm 6,1 a 6,6 cm 21 a 26 Estándar
21,3 a 23,5 mm 6,7 a 7,4 cm 27 a 34 Grande
> 23,5 mm > 7,4 cm > 34 No recomendado
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